Hace tiempo viví una situación personal que me dio pie a pensar en un símil que a día de hoy sigo usando cuando nos enfrentamos a una consultoría y debo explicar a los clientes lo que queremos hacer desde KloudSherpa. Puesto que ya varias personas me han animado a publicarlo, voy a ello.
Imaginemos la situación: tienes una cena importante, has hecho una comida deliciosa, tienes todos los detalles listos pero te falta decidir un buen vino que acompañe esta cena de comensales exigentes. Como no es tu punto fuerte, decides que lo mejor que puedes hacer es consultar con unos buenos expertos que te ayuden a elegir ese vino que encaje a la perfección.
Y tienes las ideas claras: sabes que necesitas algo que sea bueno y diferente pero, sobre todo, lo que necesitas es una ayuda que sea útil.
Llegados a este punto, se suelen dar tres tipos de ayudas:
Lo primero que se suele hacer es buscar a esa empresa que tiene estas características: un gran bagaje, un histórico, miles de empleados (de esos que van con su buena corbata), un gran nombre principalmente en inglés, compuesto de varios apellidos y que todo el mundo conoce y que, por supuesto cualquier empresa «seria» busca siempre ayuda en ellos. Y les llamas. Llegan en un despliegue de varios consultores, te escuchan, te ponen un powerpoint infinito en el que hablan de varios casos de éxito asesorando de vino, te hacen perder horas y horas con su toma de requerimientos necesarios (e innecesarios), y pasadas unas 3 semanas, por supuesto después del día de tu cena, se presentan con un informe de unos 5.000 folios en los que se adentran en la historia del vino desde los egipcios, hasta nuestros días.
Obviamente esa consultoría tiene un coste elevado, aproximadamente 10 veces el presupuesto que tenías para el vino, y además, simplemente el hecho de entender ese farragoso informe te lleva mucho más tiempo que el problema en si.
Aunque eso sí, puedes decir que esa empresa de varios apellidos ingleses te ha hecho una consultoría.
En esta maravillosa tierra de piel de toro, hemos sido mucho más de ejecutar y de tirar pa’lante, en lugar de pararnos a analizar. Aún así, han habido varias empresas que se han aventurado en hacer consultoría por perfiles que normalmente no son consultores especializados sino ejecutores y, la verdad, el resultado no ha sido malo del todo.
Volviendo a nuestra cena, si contactas con una empresa de este tipo, obtendrás por un precio que rondará el doble o el triple precio del vino, un listado de 3 a 10 vinos con unas características óptimas para tu cena e incluso con una documentación adicional bastante útil para comentar en la velada. En ese listado 3 vinos destacan: Porrera 2014 Vi de Vila, Alabaster 2014 y Pago Garduña 2013.
Lo malo es que si haces un búsqueda en Google de los mejores vinos de España del 2017, encuentras exactamente el mismo listado. Con imagen ilustrativa y todo. Ésta:
Vamos al último tipo de consultoría y, cómo ya habrás imaginado, es en la que nosotros trabajamos día a día para poder mejorar. Para terminar con nuestro ejemplo de la cena, si analizamos a nuestros comensales veremos que son gente joven, moderna y con muchas ganas de degustar cosas diferentes que complementen una cena perfecta e incluso que el propio vino sea parte de la conversación que hará que la velada sea un gran éxito.
Aquí un consultor útil, recomendaría algo diferente, por ejemplo alguno de VINTAE como por ejemplo, los vinos de MATSU, con sus originales etiquetas y su formidable relación calidad/precio.Como sabes que los comensales son emprendedores e innovadores, además cuentas la historia de VINTAE y como están consiguiendo, con un planteamiento tan moderno, introducir cantidad de vinos a través de varias bodegas a las que dotan de un marketing totalmente diferenciador y rompedor en un sector tan tradicional, como el vino de esta noche (por cierto, mis agradecimientos a las enseñanzas de ThePowerMBA, sobre el tema)
Como comentaba al principio, hace que esta elección no sólo te permita servir un buen vino, sino entender más allá de la necesidad de la consultoría inicial y aportar algo más que datos, permitiendo generar un tema de conversación que sabes que será de interés de todos. Todo ello a un precio adecuado y que en ningún caso, va a sobrepasar el coste del vino y del tiempo que me hubiera llevado a encontrar algo así…
Esta es nuestra meta en KloudSherpa, alcanzar la consultoría útil en todos nuestros clientes y en cada uno de los servicios que damos. No nos gusta quedarnos en algo que simplemente genere datos y más datos ilegibles, ni dar una solución a la que el cliente podría llegar por si mismo, sino que queremos aportar y sumar con un consultor especializado para realizar una migración de servicios, una transformación digital óptima o simplemente realizando un diagnóstico veraz.
Y, por supuesto, mejorando procesos a través del famoso Cloud, en nuestro caso, como saben nuestros clientes, Kloud con K de nuestro partner fundamental KIO Networks.
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